"Los radicales no nos sacamos fotos con barrabravas", sentenció a La Nación el pretendidamente impoluto Oscar Aguad, jefe de la bancada de diputados radicales, al conocerse las fotografías de los ministros de Economía, Amado Boudou, y de Educación, Alberto Sileoni, con el barrabrava señalado como presunto asesino del militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra.
No conforme, en su intento por involucrar directamente al gobierno nacional con el crimen y las patotas sindicales organizadas para amedrentar y asesinar -como en el caso de Mariano- a opositores internos y externos, Aguad aseguró que "el que se saca fotos es porque convive con ellos. Es una demostración elocuente de que el Gobierno tiene intereses en esos grupos".
Pero como todos tienen historia, sobre todo los radicales, por aquello del "centenario partido", el diputado nacional y precandidato a gobernador de Córdoba también tiene la suya e incluso puede graficarse con instantáneas que, por cierto, no lo dejan mejor parado, más bien mucho peor, que a Boudou o a Sileoni.
Para muestra, la que encabeza este artículo, donde se lo ve junto al genocida Mario Benjamín Menéndez, condenado por el Tribunal Oral Federal Nº 1 de Córdoba a prisión perpepua por delitos de lesa humanidad durante la dictadura militar. Allí también está otro insigne radical: el senador Ramón Mestre.
"Yo no me saqué una foto con Menéndez en un acto protocolar y él se paró adelante mío", trató de explicarse el diputado para quien, como queda probado, hay varas para unos y varas para otros. Cada quien sabe con cuál medirse.
Pero como todos tienen historia, sobre todo los radicales, por aquello del "centenario partido", el diputado nacional y precandidato a gobernador de Córdoba también tiene la suya e incluso puede graficarse con instantáneas que, por cierto, no lo dejan mejor parado, más bien mucho peor, que a Boudou o a Sileoni.
Para muestra, la que encabeza este artículo, donde se lo ve junto al genocida Mario Benjamín Menéndez, condenado por el Tribunal Oral Federal Nº 1 de Córdoba a prisión perpepua por delitos de lesa humanidad durante la dictadura militar. Allí también está otro insigne radical: el senador Ramón Mestre.
"Yo no me saqué una foto con Menéndez en un acto protocolar y él se paró adelante mío", trató de explicarse el diputado para quien, como queda probado, hay varas para unos y varas para otros. Cada quien sabe con cuál medirse.
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